Era el año 2016 y ‘El Apache’ firmó por el Shenhua a cambio de un salario de 35 millones de euros netos anuales, una cifra que le convertía en el jugador mejor pagado del mundo por aquellos tiempos, por delante de los dos gigantes que dominaban el fútbol, Leo Messi y Cristiano Ronaldo. O como dices, una tercera equipación, porque a mi no me suena verla en la vida.